domingo, septiembre 17, 2006

Esto me pasa

Esto me pasa


Tantas cosas que cruzan por el espacio entre tu y yo. Tu de un lado y yo del otro y sin saber, algo pasaba por ahi entre los dos. Palabras, acciones, pensamientos, deseos. Ese río de incesantes movimientos era tan dificil de cruzar, yo lo intentaba, tu ni lo pensabas, o si? Lo mas cerca que estuve de ti fue aquella hora de completa soledad, el río se tranquilizo, y tu mirabas algo que se movia, tus miedos no te permitían ver más alla. Aparecí delante de tí, te sorprendió verme, me abrazaste y me dijiste que que bueno que llegaba, yo estaba feliz de verte pero, nervioso por alguna razón. Me dijiste que me sentara, lo hice y las cosas se detuvieron al rededor, toda esa gente que hablaba y reía se había callado, nos quedamos solos, tu y yo en este infinito mundo. Ese río se tranquilizo y se hizo un gran estanque. La tensa calma reinaba sobre nosotros. Comenzamos a platicar. Me preguntabas de mi día, yo estaba intranquilo por saber del tuyo. Poco a poco nos fuimos adentrando en la mente del otro. Tu sabías lo que pensaba, yo sabía todo de tí. Y entonces esa tensa calma se rompió, un movimiento brusco en los cimientos de nuestra relación estremeció nuestro panorama: "....Una oportunidad?" te dije. Y todo pasó tan rapido. Te espere impaciente. Tu nerviosa, no sabías que decir, ni que pensar. Te dije, que no te preocuparas, que estaba bien si me decias que no, entendia tu posición y tus deseos, dentro de mí sabía que no eras tan negativa. Me dijiste: "Si me gustas, si quiero, pero recuerdas lo que te platique en la madrugada, hablando por telefono? no puedo...". Y el río se desbordó! Arrasaba con lo que estaba a su paso, la gente se volvió violenta y se peleaban unos con otros, mi plataforma se cimbraba y ya no te podía ver por el caos que había alrededor de nosotros. Dentro de mí pensé "Estúpido! Lo olvidaste! La regaste! Se acabó!" Y es que, no recordaba lo que me habías dicho de tu semestre anterior, de dos semanas atras, de lo que olvidé de eso te valiste para acabar con mi fe. Y me hundía en el mismo río que alguna vez nos juntó. Ahora ese monstruo de cosas intangibles, sofocaba nuestra relación. Y te pedí que no afectara nuestra amistad, ignarando que indudablemente, eso mismo tendría que pasar. Ahora solo me hundo y me ahogo, y tu te quedaste en aquella orilla, me intentaste rescatar. Una oportunidad, una bala perdida que fue a dar fuera del blanco. La única que tenía. Olvídalo. Que ya lo olvidaré.

KM/06

Se regala corazón. No vale mucho, nada.